Kater, die blauenkatze

Esta entrada la escribí hace un año. Pero no la llegué a publicar. Ahora la publico y una vez la hayan leído entenderán el porqué no se publicó en su día y sin embargo lo hago ahora.. 12-12-2011. Se preguntarán que hago yo haciendo una entrada en alemán. Pues porque esta entrada está dedicada a una persona que no habla español, así que por lo menos el título será en alemán. El caso es que me gustaría contarles el final de mi milagro. Bueno, de mi milagro no, del milagro de Brandy. Después de no pocas averiguaciones, al final pude contactar con la persona que lo tiene en Alemania. Y sí, es Brandy. Yo ya estaba segura, le hubiera reconocido esa carita entre un millón de gatos. Pero después de cambiarnos unos cuantos correos, la seguridad es absoluta. Y no ha cambiado nada de nada, sigue igual de sinvergüenza, de glotón y de escandaloso. ¿Recuerdan que cuando apareció nos dimos cuenta por su maullido? Miau, Miau, Miau… Ese miau me acompañó durante cinco años. Y...